segunda-feira, junho 04, 2007

Khaled Daud Faquih, un bebé palestino de seis meses, murió el pasado 8 de marzo en un control de seguridad israelí, cuando sus padres intentaban trasladarlo al hospital de Ramala para que fuera atendido por sus dificultades respiratorias. Falleció a 10 minutos del hospital ante la impotencia de sus padres y la tranquilidad de los soldados israelíes. A punto de cumplirse 40 años de la ocupación de Israel en Cisjordania y la franja de Gaza, Amnistía Internacional pide a las autoridades israelíes que pongan fin a esta constante violación de los derechos humanos.